Cuando empecé a dar clases noté que había perdido mucha rapidez en el cálculo mental. En la carrera no lo necesitaba, después tampoco... Estaba totalmente desentrenada.
Recuerdo que cuando era una cría a veces cogía una baraja y empezaba a pasar cartas y sumarlas. Hacía una especie de solitario, pero simplemente sumando lo más rápidamente posible. Una frikada, vamos...
En los diferentes centros en los que he trabajado hasta ahora ha sido una queja repetida: No saben operar, sacan la calculadora para todo, no saben ni sumar, no se saben las tablas... ¡¡Qué vergüenza!! ¿Cómo han llegado así a la ESO? Esto no puede ser...
Yo también me sumaba a las quejas pero no hacía nada para remediarlo.
Comentábamos y, a veces, hasta pactábamos entre los profesores de mates cuándo les íbamos a dejar la calculadora.
Nada, el que sabe calcular rápidamente y quiere, lo hace, el que no, no lo hace. Así de simple. Da igual que les dejes o no usar la calculadora. Esperan a que alguien lo haga por ellos o a llegar a casa para poder hacer las operaciones.
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| Imagen de Mauropm |
Fue en unas Jornadas Matemáticas organizadas por Tornamira, la asociación de Matemáticas de Navarra, (en las que por cierto participé como ponente comentando el trabajo con el blog "LA SUPERCHULETA"), donde vi por primera vez las hojas de cálculo mental de Jesús Javier Ibañez. Me parecieron interesantes, pero por hache o por be, nunca me decidí a llevarlas al aula.
El año pasado puse en práctica algo que había visto por la red, pero no recuerdo dónde: EL CARNE DE CALCULISTA. Solo lo hice en 1º ESO, al resto directamente les dejaba la calculadora.
Consistía en hacerles a los alumnos una prueba de cálculo con las operaciones básicas (suma, resta, multiplicación y división con decimales). Si no cometían ningún fallo les entregaba un carnet personalizado con su nombre y foto. Significaba que hasta la siguiente prueba podían usar la calculadora en clase. Era obligatorio acordarse de llevar el carné y ponerlo en la mesa.
En la mayoría de los casos no hizo sino constatar lo que ya sabía: quienes calculaban bien y los pocos que eran. Había un poco de pique por aquello de tener el carné, pero nada sustancial.
Sin embargo este año, y animada porque otros compañeros de departamento las usaban a diario, empecé con las hojas de cálculo mental.
Lo primero decir que son excelentes, se consigue el objetivo buscado, los chavales aprenden y practican el cálculo mental. Hay muchas hojas de diferentes niveles y tipos de operaciones, pero el procedimiento es el mismo.
Voy a explicaros primero el mecanismo y mi forma de trabajo.
Mecánica de trabajo
Doy una breve descripción, ya que podéis ver en la página de JJ todo totamente desarrollado.
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| Hoja de operaciones |
Las hojas, como podéis ver a la derecha, están organizada como el juego de los barquitos. Cada día tú les dices a los alumnos por dónde deben empezar, por ejemplo C9, y a partir de ahí tienen un minuto para hacer el máximo número de operaciones posible.
Cada una de ellas la deben recoger el la tabla en resultados, contar los aciertos y poner la nota correspondiente (cada hoja tiene una nota distinta para el mismo número de aciertos).
Otro control de los resultados se lleva con una gráfica en la que van poniendo en número de aciertos, que posteriormente se unen y se hace una pequeña gráfica. Hay también otro apartado para la media de la clase y la personal.
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| Tabla de resultados |
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| Hoja de gráficas |
Mi forma de trabajo
Cada uno de mis alumnos tiene una tabla de resultados y otra de gráficas (un folio por las dos caras) para su trabajo personal.
Cuando llego a clase les recuerdo ""¡Cálculo mental!" y dedicamos los primeros 5 minutos a trabajarlo. Las hojas con las operaciones que deben hacer las llevo yo, las reparto cada día. Se ha mecanizado de tal forma que no tardamos nada. Se las entrego al primero de cada fila y las van pasando hacia atrás. No les dejo que las lleven a casa porque ninguno las trabaja y alguno sí que las usaría para hacer las operaciones con la calculadora, copiar los resultados y hacer trampas.
En un instante están la mayoría colocados y preparados para empezar. Siempre falta alguno, pero para eso doy los típicos tres avisos: "Preparados, listos, ¡¡ya!!". Mientras los dices siempre que hay alguien que dice "Espera, espera... no.. jo..." Da igual, en cuanto comienza el tiempo todo el mundo se pone a trabajar en silencio. Es bonito.
Solo un minuto. Puedo asegurar que dan todo lo que tienen. No solo hacen un ejercicio de cálculo mental sino otro tanto o más importate de rápida concentración.
Una vez pasado el minuto se intercambian las hojas para corregirlas entre ellos con las soluciones que yo voy diciendo en voz alta. Se ponen nota y se devuelven las hojas.
Las sesiones diarias son sesiones de preparación, de entrenamiento. Cuando ya parece que van dominando la mayoría la hoja hago una de examen. Tengo una hoja de resultados por alumnos para dársela el día del examen. Hacen en ella el cálculo, la recojo y corrijo yo. Se hace muy rápidamente la verdad.
Como es algo que se trabaja en clase hay que evaluarlo y valorarlo. Uso esos resultados y suponen un 5% de la nota.
Como suele pasar son peores cuando se corrigen entre ellos, se "pican" y no se pasan ni una...
No tardamos mas de cinco minutos en todo y os puedo decir que he encontrado un montón de ventajas para los alumnos:
- Practican el cálculo mental a diario.
- Hacen un ejercicio de concentración.
- La clase se asienta y se centra en la materia
- Se tranquilizan
- Te centras en la clase.
- Sacas y preparas el material para esa sesión.
- Ves cómo están de alterados ese día.
- Se sientan y preparan para la asignatura con mayor facilidad.
- Si vienes de una clase anterior te da tiempo a relajarte y descansar un poco.
- Otros compañeros hacen alguna variación: les dejan a ellos las hojas con las operaciones, solo lo trabajan un día a la semana, siempre son ellos los que corrigen... Cualquiera es buena, siempre y cuando hagamos algo para no olvidarnos de que hay que trabajar el cálculo mental.
- Como ya trabajamos el cálculo mental en clase pueden usar la calculadora. Es más, les enseño en manejo en cada tema, me parece necesario. Está para usarla, ahora bien, de forma racional...
