EL LIBRO EN EL AULA

Estos días he estado muy liada y no he avanzado prácticamente nada en el proyecto. Cuántas veces se me ha pasado por la cabeza lo cómodo que es dar la clase siguiendo el libro y fuera... He de reconocer que también lo hago en ocasiones, a veces porque me parece que está bien lo que el libro propone y en otras por pereza o falta de tiempo para preparar otro material.

Imagen de Grevel

He observado también que los alumnos, al contrario de lo que cabría esperar, son bastante reacios a trabajar sin el libro, de formas alternativas. Una sola sesión sí les gusta, pero eso de hacer todo un tema... Gran parte de la culpa, por no decir toda, es nuestra. No les hemos enseñado a trabajar de otro modo. Les da mucha seguridad el libro. Veo que incluso cuando tú explicas la teoría correspondiente a un tema, con sus ejemplos, en la pizarra de forma distinta a cómo lo hace en el libro, algunos alumnos te hacen ver esta diferencia: "Pero en el libro pone... pero en el libro dice..."